El ruido de las llaves en el portal
me anuncia
la llegada de mis padres,
Y los ladridos de los perros en el patio
me anuncian
la tuya.

Tengo un oído
muy fino y siniestro,
pero un ojo
muy miope y cansado.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tampoco estás tan cegata mujer, eso sí,tu oido es un radar... Besos . Rebelderia