LA VUELTA

Supe que el recuerdo sólo podía ser alegre
porque, si quisiera, habría llorado de alegría.
La estación se hacía cada vez más pequeña
a mi alrededor.
Ya estaba en casa. Aunque Madrid nunca iba a ser
lo mismo. Demasiada gente (no sé si será un defecto
o seré yo, que lo escribo en mal momento).
Quería volver. ¿Otra vez?
¡Allí también hacía frío!
Es mejor que te echen de menos
a que te echen de más.
Cuánta gente hay en Madrid.

A veces me pongo insoportable.

1 comentario:

Anónimo dijo...

hummmm, es una poesía rara? que significa? pero al mismo tiempo es mu salá ^^

bueno ya me dirás mosa